Laberintos, Caminos y Rincones

Querido Santa, para estas navidades quiero creer en ti como cuando era niña, quiero esperar impaciente con mis hermanos hasta que nos venciera el sueño, para luego despertar con apenas tres horas de sueño y ver que los regalos ya estaban en el arbol, pero como ya se que estoy muy vieja para eso, y no puedo retroceder el reloj, te voy a pedir lo siguiente:

Quiero que mis enanas puedan tener la misma inocencia que tenía hace ya tantos años atras, y ver sus rostros iluminarse al ver que aparentemente no sabes en realidad lo tremendas que fueron durante el año, pues les diste todo lo que pidieron.

Quiero que mi familia, siga siendo tan disfuncionalmente perfecta, y que nunca nos falte el amor que tanto nos ha caracterizado.

Quiero que mi papiringo siga sonriendo como lo hace (aunque sabemos no tiene mucho sentido del humor) que mi madre siga encontrando alegría dandole a los mas necesitados, aun si eso signifique dar lo único que tiene.

Que mis hermanos puedan ser tan Buenos o mejores padres que los que tenemos, y el significado de la familia no cambie para ellos.

Quiero, quiero, quiero... cuantas cosas quiero... suena egoista, pero este año solo quiero que los mios
tengan todo lo que su corazón anhele, querido santa, no te olvides de mi niña interna, que sigue amando los villancicos.

Querido santa, que no nos falte el sentido del humor, que nunca seamos prepotentes, y que encontremos grandeza en las pequeñeces.

Pero sobretodo querido santa, acuerdate de esos niños que no tienen la dicha de tener una familia como yo la tuve, que puedan encontrar en sus casas los juguetes que tanto quisieron, y que el mundo no los haga crecer antes de tiempo; Dios sabe que mi niñez fue larga y bien vivida, que siempre pense que era rica, (aunque en realidad nunca me percate de lo mucho que mis padres se sacrificaron para darnos todo lo que soñamos).

No te voy a decir que me he portado bien, pero si quieres hacerte de la vista gorda como lo hacias cuando era niña, te lo voy a agradecer.

Muchas gracias y Feliz Navidad querido Santa...

Att. Ibelkita la Dude

A medida que se acercan los días, le doy más y más mente a que pasara con mi vida cuando entre en los TA...

Trato de meditar si tengo todo lo que anhele tener para esta etapa de mi vida, la realidad es que no, para esta etapa, para los tan temidos TA, se supone que estaría casada, con hijos, casa propia y hasta un lindo perrito Bulldog que se llamaría Mack.

La realidad no tengo nada de eso "Aun" no estoy casada (pero no creo quererlo estarlo todavía), obviamente hijos sin matrimonio no sería lo ideal, y vivo sola en un apartamento, por lo que Mack el pobre quizás se moriría de la tristeza... Otra realidad, es que quizás nunca quise nada de eso, son leyes invisibles impuestas por una sociedad machista, donde las primeras machistas son las mujeres; Si leyeron bien, en Santo Domingo las primeras machistas son las mujeres, quieren libreación femenina, pero no quieren pagar la cuenta en un restaurante, quieren ser autónomas, pero la mayoría se muere sin hombre; es mal visto que vivas sola y no con tus padres, y te critican cuando prefieres estar en tu casa en PJ's bebiendo café y leyendo un buen libro, en vez de estar en un bar buscando "el hombre perfecto" (que por cierto, lamento decirles esto, pero el hombre perfecto no existe) pero bueno, eso es tema para otro día, retornando a los tan temidos TA.

Dentro de pocos días cumpliré 30; y la realidad es que nunca me he sentido tan realizada como hasta ahora, soy mi propia persona adulta de 30 que aún se da el lujo de pensar como niña cuando le da la gana, tengo un trabajo, sigo teniendo sueños, que aunque quizas hayan cambiado con el tiempo, siguen estando ahi, Y no... no siento que la vida se me va porque cumplire 30 y no tengo lo que la "sociedad" exige de mi...

Y en realidad no es diferente a cuando cumplí mis 15 o mis 21, son números que para mi no significan nada mas que una forma de cuantificar al ser humano y medirlo arbitrariamente, respecto a si es exitoso o no.

Que son los TA... nada, un número que no me define, ni como mujer ni como persona, y llevare mis TA con orgullo, pues cada año ha sido una experiencia, un cuento, un aprendizaje y un peldaño mas a mis sueños tan cambiantes, pero muy mios!